El Zamora Club de Fútbol caía ante el Villarreal en la prórroga por 1-2 en la segunda ronda de la Copa del Rey y queda así eliminado del torneo del KO. El gol de Etxaburu en el minuto 47 fue contestado por Morales en el minuto 88 para mandar el encuentro a la prórroga. En ese tiempo suplementario, otro tanto de Morales le daba el pase al Villarreal.
Lució sus mejores galas el estadio Ruta de la Plata con alrededor de seis mil personas para seguir el encuentro ante un equipo de Primera División y habitual en los últimos lustros en competición europea. La hinchada soñaba con plantar cara a un equipo que tiene en su plantel a futbolistas de una contrastada calidad y muchos de ellos con varias internacionalidades.
El equipo de David Movilla empezó bien el encuentro, tuteando al Villarreal y acercándose a la portería de Pepe Reina. Con el paso de los minutos, los visitantes asumían la posesión y los zamoranos se refugiaban en un bloque bajo para cerrar todos los espacios. Ese buen trabajo defensivo se tradujo en escasas ocasiones de gol del rival y un 0-0 al descanso.
No pudo comenzar mejor la segunda parte. Etxaburu remataba de cabeza un saque de falta de Marcé. La locura se instalaba en las gradas y el Zamora se refugiaba en ese bloque bajo que le estaba dando resultados. Pudo ampliar ventajas el Zamora en una contra que definió Parra demasiado alto y en una acción sobre Luis Rivas en la que todo el estadio pidió penalti. El colegiado no lo cobró y el duelo entraba en su recta final.
Apoyado en una gran defensa y en un Fermín Sobrón soberbio, los rojiblancos se veían cada vez más cerca de la clasificación. Pero en el minuto 88 llegó el mazazo. Un disparo de Morales tocó en Javi Barrio y despistó a Fermín Sobrón. Ese empate llevaba el duelo a la prórroga. Allí se adelantaba el Villarreal en el primer acto con otro tanto de Morales.
Pero el Zamora no se rindió, y espoleado por la grada acabó metido en el campo del Villarreal los últimos diez minutos, colgando balones, y obligando al rival a terminar pidiendo la hora. Etxaburu tuvo el empate en el último minuto, pero su cabezazo, casi a portería vacía, se marchó fuera.
Al final derrota por 1-2, eliminación, pero una sensación enorme de honor y orgullo por el partido realizado.
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